HAIM G.GINOTT

Capítulo 9 - el sexo adolescente y los valores humanos

Una discusión sobre el sexo: Seis Padres - seis vistas diferentes

Un grupo de madres profundamente preocupados por sus hijos adolescentes se reunieron para discutir una preocupación común. El tema era el sexo. La discusión ilustra cómo seis personas de manera diferente en la comunidad se sienten acerca de este tema.

R: Yo vengo de una familia estricta y pasado de moda. El sexo nunca fue discutido en nuestra casa. El amor era algo espiritual y privado. Soñé con el romance, pero nunca hablé con mis padres. Me resulta terriblemente molesto cuando mi hija me hace preguntas sobre el sexo.

B: Tengo el mismo problema. Cada vez que mi hijo adolescente me pregunta nada sobre el sexo, mi rostro se torna carmesí. Me congelo. Tartamudeo. A pesar de todos mis esfuerzos, me siento avergonzado. Mi hijo se rió de mí cuando dije una vez que dos conejos se casaron. Yo no me atreví a decir que se aparearon.

C: El sexo siempre ha sido un misterio para mí. No sé lo que está bien y lo que está mal. Mi madre solía decir que "todos los hombres son iguales. Quieren sólo cosa. "Me enseñaron que el sexo era feo. No quiero que mi hijo y mi hija a sentirse así.

D: En los viejos tiempos, el autocontrol es una virtud. Ahora bien, es un vicio. "Casto realizar residuos", dice mi diecinueve años de edad, hija, "La castidad no tiene más valor que la malnutrición." Mi segundo año de universidad cree que es correcto tener relaciones sexuales, siempre y cuando haya amor mutuo. Su hermano mayor, estudiante de la universidad, es más "avanzado". Él cree que es correcto tener sexo sin amor, siempre y cuando no disfrute mutuo. "El sexo con amor es bueno", explicó, "pero el sexo sin amor es mejor que nada."

E: Soy una madre liberal. No creo que la virtud depende de la abstinencia. Pero estoy preocupado por mi hermosa hija. No quiero que ella sea explotada. No quiero que esta flor para terminar en el ojal de un tonto.

R: He tratado de mantener mi hija lejos de los niños. He dicho a sus historias verdaderas, de lo que le puede pasar a las chicas jóvenes. Yo quería que ella fuera segura. Me temo que he logrado mucho. Mi diecisiete años de edad, es tan ingenuo, me gustaría que fuera más sofisticada y en todo el mundo sabia.

E: Usted hija podría utilizar algo de influencia "malo" y algún tipo de educación sexual. La moral depende del conocimiento, no la ignorancia. Creo que los adolescentes deben saber acerca de los temas sexuales, sobre el amor, la concepción y anticoncepción.

B: No es fácil cambiar viejas actitudes. A pesar de toda la educación intelectual que soy una mojigata. Ojalá no lo fuera, pero lo estoy. Toda esta charla sobre la liberación sexual y las relaciones significativas sólo significa una cosa para mí: las relaciones sexuales prematrimoniales. No puedo autorizarlo. Sigo creyendo que es un pecado.

D: Estoy preocupado por el bienestar de mi hija. Si estuviera madura, yo no me preocuparía por su comportamiento. Pero ella no lo es. Existe una brecha entre sus terribles deseos sexuales y su madurez emocional. Sólo el tiempo puede llenar este vacío. ¿Qué debo hacer hasta entonces?

E: Es hora de dejar de enseñar viejos prejuicios sobre el sexo. Los adolescentes se enamoran y hacen el amor. Hay poco que podamos hacer al respecto, excepto para instruirlos en el uso seguro de la anticoncepción.

C: Muchos jóvenes no quieren usar anticonceptivos. Prefieren vivir peligrosamente. Se sienten invulnerables. Ellos juegan a la ruleta rusa con sus jóvenes vidas.

E: Estoy cansado de la doble moral. Si las mujeres han de ser realmente libre, la educación sexual y métodos anticonceptivos deben ser aceptados abiertamente. Para mí, la cuestión no es "la castidad frente a la pérdida de la virginidad", pero "el amor responsable frente a la promiscuidad".

A: La libertad sexual está bien, pero no para mi hija. Todo lo que puedo ver es que va a dar lugar a caprichos superficiales, envolvimientos eróticas y angustia. Puede ser bueno para los niños, pero no para las niñas. "La abeja puede volar de flor en flor, pero la flor no debe pasar de abeja a abeja."

F: Cuando era joven me pegué el manifiesto ético mi cuarto de baño espejo de Hemingway: "Lo que es moral es lo que se siente bien después. Lo inmoral es lo que se siente mal después. "Hice el amor sin culpa o remordimiento. Yo estaba decidido a ser libre de complicaciones inducidas culturalmente. Yo no era indiferente a los sentimientos de mis padres, pero yo quería ser independiente de sus juicios morales. Pero ahora soy una madre de una hija adolescente. Y estoy confundido. Intelectualmente, puedo aceptar la idea de que ella va a tener relaciones sexuales antes del matrimonio. Pero yo no quiero saberlo. No quiero que me consultan o para compartir conmigo, y por supuesto, yo no quiero que se quede embarazada.

C: Si vivo a través de esta semana, yo soy inmortal. Nunca me voy a morir. Hace tres días me encontré a mi hija toda acurrucada en la cama, llorando como un bebé. Ella pensó que había contraído una enfermedad de transmisión sexual. Mi dulce, bella Linda, la niña de los ojos de su padre. Mi primer impulso fue el de matar a su carnicero y el niño. Pero una voz interior me advirtió: No ataque. Sea atento! Cuando las cosas van mal, hacer algo bien. Le dije: "No sabemos a ciencia cierta que está infectado. Un médico nos puede decir. "Hoy nos enteramos de que Linda no había sido infectado. Nos sentimos aliviados de una pesadilla. Pero habíamos pagado un precio terrible en la ansiedad, el miedo y la vergüenza.

D: Es evidente que el temor a las enfermedades venéreas y el embarazo no se detiene a los jóvenes de sexo. Por lo tanto, tenemos que enseñarles a manejar su sexualidad. Debemos proporcionarles los conocimientos y la protección. No podemos poner una presa en el flujo de la vida, pero podemos enseñarles a nadar en aguas turbulentas.

Un conflicto de valores

Esta discusión refleja un profundo conflicto de valores. Algunos padres sienten que ha llegado el momento de aceptar la nueva realidad. Ellos están preocupados por las enfermedades de transmisión sexual, embarazos no deseados y las reputaciones arruinadas. Tienen la esperanza de evitar estos peligros mediante la educación sexual franca. Algunos de ellos abastecer a sus adolescentes mayores con información y métodos anticonceptivos.

Otros padres rechazan estas medidas, indignada. Temen que esta libertad animará licencia. Ellos sienten que la sociedad no puede sancionar el sexo adolescente, ya principios de despertar erótico puede poner en peligro la civilización. Como un padre, lo expresó así: "La principal tarea de la juventud es estudiar y adquirir conocimientos. Para realizar esta tarea, es mejor mantener la 'tapa en el id.' "Algunos padres incluso la discusión de repugnante sexo y de mal gusto. Otro padre dijo: "El sexo puede haber ido tan público como AT & T, pero no quieren participar en ella." Algunos padres temen que hablar de sexo estimulará actos sexuales, incluso cuando el objetivo es el autocontrol. Estos padres creen firmemente que incluso en esta era de cambio de las costumbres modelos parentales adecuados pueden asegurar una conducta adolescente deseable. Como uno de los padres lo expresó así: "Sólo cuando los adultos dar un ejemplo digno y decente comportamiento de la demanda, los hijos se convierten en el tipo de personas que queremos que sean." La pregunta es: ¿Cómo pueden los adolescentes mantener los niveles deseables en una sociedad que es francamente sexo orientada?

A Paradox Pública

En materia de sexo, las actitudes son más elocuentes que las palabras. ¿Qué es la verdadera actitud de la sociedad hacia el sexo? ¿Cuál es nuestra concepción de la moral alta? Tenemos modelos de la riqueza y de los ideales de heroísmo. Sabemos lo que es grande en el arte y que se destaca en la ciencia. Sin embargo, como sociedad, nos faltan modelos de excelencia moral.

Adolescentes pensativas están desconcertados por una paradoja público prevalente. Por un lado, nuestra sociedad está obsesionado con el sexo y el dinero-motivado. Para la diversión y el beneficio, el sexo se unta en las pantallas, sopla en las carteleras, y se utiliza para incentivo comercial. Por otro lado, la sociedad dice que cree en la abstinencia antes del matrimonio. Esta situación crea un conflicto y tensión.

Los tabúes Tumbling

El genio de nuestro tiempo es la sinceridad y la libertad. El sexo ya no es un tema prohibido. Se enseña en la escuela y discutido en casa. Incluso en la iglesia, la moral se vuelve a evaluar a la luz de la realidad. Y en realidad, el sexo siempre ha sido popular.

¿Por qué la educación sexual?

Los adolescentes están ansiosos de aprender todo lo posible sobre el sexo. Ellos están molestos y perplejos y quieren respuestas reales y personales. Cuando se le ofreció y la oportunidad de discutir seriamente el sexo, los adolescentes hablan libremente y de manera prudente. Buscan normas y significados. Ellos quieren llegar a un acuerdo con su sexualidad, y para integrarla en su personalidad total.

Si la educación sexual se ofrecerá a los adolescentes? Esta pregunta llega demasiado tarde. El sexo ya se "enseña" - en la pantalla, en el patio de la escuela, y en las calles. En palabras e imágenes, nuestros niños están expuestos al sexo que a menudo sórdido y vulgar. Nuestras calles son una fuente incesante de desinformación. Vendedores Smut nunca dudan en compartir sexo. Peers gusto hablan de experiencias, reales e imaginarios. Es el padre y el maestro que a menudo temen que compartir información íntima.

Dice de dieciséis años de edad, Selma:

"No puedo pedir a mi madre algo de sexo. Es lo que hago, ella comienza a preguntarse por qué hice la pregunta. "¿Qué quieres saberlo?" insiste, "a menos que ..."

Dice de catorce años de edad, Juliet:

"Mi madre cree que la ignorancia asegura inocencia. Ella se enoja cuando le pregunto nada sobre el sexo. Ella dice: "Tu marido te enseñará todo lo que tienes que saber."

Dice de quince años de edad, Joshua:

"Mi padre siempre sopla su cuerno de ser franco y veraz. Pero su honestidad termina donde empieza el sexo. Esta es un área donde mi candor no es bienvenida.

Diecinueve años de edad, Natalie, una estudiante de segundo año universitario dice:

"Mis padres y yo vivo por la gracia de un código tácito: 'No hay preguntas profundas, ni respuestas reales. Ellos realmente no quieren saber lo que pasa. Y no puedo decirles. Soy, por así decirlo, una buena chica con la moral convencional. Me gusta hasta la fecha. Las primeras reuniones son agradables. Luego viene la presión. Usted está invitado a fiestas con alcohol y drogas. Se da por sentado que va a ir a la cama. Como se suele decir: "Si lo hace, el mundo sonríe con usted. Si no lo hace, usted llorar solo. Por lo tanto, estoy lleno de integridad y lágrimas.

Veintiún años de edad, Jonathan acepta esta situación cínica. Él dice:

"Para los universitarios, el sexo es un símbolo de la madurez y la masculinidad. Para las niñas, es una salvaguardia contra la impopularidad y la soledad ".

La discusión anterior indica que la educación sexual que se necesita ahora para servir como un antídoto contra la propaganda sexual. La sociedad puede permitir no pasivamente la calle y la pantalla para establecer sus normas sexuales.

Información y valores

La educación sexual tiene dos partes: la información y los valores. Los valores se aprenden mejor en casa. Información mejor se puede dar por expertos. ¿Qué deben hacer los padres cuando un hijo pide información sexual? Dentro de los límites del conocimiento y comodidad, deben proporcionar respuestas. Otras preguntas se refieren más a los expertos. La información dada a la objetividad y honestidad puede disminuir la hostilidad y aumentar la confianza entre las generaciones.

Todos nosotros debemos afirmar que, la honestidad y la responsabilidad se refieren a todas las relaciones humanas. Todas las situaciones, simple o compleja, social o sexual, requieren de la integridad individual.

Es tarea de una niña de no permitir a sí misma para ser utilizado como una herramienta. Es obligación de un niño no utilizar una chica como un objeto. Los niños y las niñas tienen que saber que no todo se vale en el amor y el sexo. Es injusto que una chica para molestar y provocar un niño. Es injusto que un niño para colocar todo el peso de las decisiones sobre la chica. En el viejo patrón, un niño trató de ir tan lejos como la chica se lo permitió, sin cuestionar su disponibilidad, o su responsabilidad. Los jóvenes necesitan que se les enseñe a enfrentar estas cuestiones con honestidad. Las discusiones abiertas acerca de la responsabilidad mutua puede mejorar la capacidad de los adolescentes para tomar una decisión sabia sobre el amor y la vida